Cirugía Restrictiva
La cirugía restrictiva reduce el tamaño del estómago para disminuir su capacidad de almacenamiento de alimentos. También disminuye la velocidad de salida de alimentos del estómago, de forma que la sensación de plenitud es más precoz, intensa y duradera. La pérdida de peso que se obtiene es menor que con las técnicas mixtas
(restrictivo-malabsortivas) como el bypass gástrico, y se suele recuperar algo de peso con los años. Sin embargo, el número de complicaciones y efectos adversos es también muy inferior.
Este tipo de cirugía está indicada en una persona con un índice de masa corporal (IMC) menor de 45 kg/m 2 , bien informada, consciente de las limitaciones de la técnica y de la posibilidad de necesitar en un futuro de otra técnica si la pérdida de peso obtenida fuera insuficiente, si existieran complicaciones y/o si la calidad de vida fuera
inadecuada.
En general, todas las operaciones restrictivas puras deben acompañarse de una limitación posterior en el consumo de alimentos y requieren que estos se mastiquen muy bien para evitar los vómitos. La persona cuya obesidad se debe a un consumo exagerado de azúcares simples (golosinas, azúcar, tartas, pasteles, etc.) puede no responder adecuadamente a esta técnica.
Las técnicas de cirugía restrictiva más utilizadas
-Banda o anilla gástrica.
Consiste en la colocación de una banda alrededor del estómago. Se suele realizar mediante laparoscopia (técnica mínimamente invasiva) a través del ombligo y no suele presentar complicaciones serias. El diámetro de la banda es autoajustable por medio de un dispositivo colocado debajo de la piel, dentro del cual se puede inyectar o extraer suero salino para hacer más estrecho o ancho el paso de la comida. Si se estrecha en exceso son frecuentes los vómitos. Si no se cierra lo necesario, la saciedad será menor. La banda puede retirarse cuando se desee, lo que habitualmente se sigue de recuperación del peso. La banda no es eficaz si se consumen líquidos con un alto valor calórico (como helados), pues alcanzan el intestino y se absorben sin problema.
-Cirugía gástrica.
Se realiza reduciendo el volumen del estómago que recibirá los alimentos mediante grapas quirúrgicas. Incluye la gastrectomía vertical y la gastroplastia tubular o en manga. La gastrectomía tubular o en manga es la técnica más empleada en cirugía bariátrica actualmente. No se practica cuando existe reflujo gastro-esofágico, pues esta técnica habitualmente lo empeora. Además del componente restrictivo genera una respuesta de las hormonas intestinales que generan efectos favorables sobre el control de la saciedad y el metabolismo, reduciendo la resistencia a la insulina.
Cuando existe un gran exceso de peso con IMC>50 kg/m2, se puede llevar a cabo, si es necesario, una gastrectomía tubular en un primer acto y completarla con una cirugía derivativa más tarde una vez el paciente haya perdido peso de forma significativa y existe menor riesgo quirúrgico.
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Técnicas de cirugía mixta o restrictiva-malabsotiva, entre otras
Produce modificaciones anatómicas permanentes en el aparato
digestivo para limitar el volumen gástrico y la cantidad de calorías que puedan ser absorbidas. El cirujano realiza una derivación que evita que los alimentos pasen por una determinada zona del intestino delgado para que el trayecto recorrido por los alimentos sea más corto y así se absorban en menor cantidad (ej. by-pass gástrico). Las técnicas más malabsortivas como la derivación bilio-pancreática o el cruce duodenal poseen mayor capacidad para reducir peso pero con mayor riesgo de efectos secundarios en forma de alteraciones nutricionales que pueden ser importantes.
Tipos de cirugías mixtas
-Bypass gástrico en Y de Roux
Es una de las técnicas más utilizadas. Reduce el estómago al tamaño de un huevo y limita la absorción de calorías desconectando el estómago de la primera porción del intestino delgado (el duodeno) y reconectándolo un poco más abajo (en el yeyuno). Es una técnica que genera reducciones de peso significativas mantenidas en el tiempo. Se suele realizar por vía laparoscópica, es irreversible y presenta más riesgo de complicaciones que las técnicas puramente restrictivas. Dependiendo de la longitud de intestino en la que se evite el paso de alimento, el bypass gástrico puede ser proximal o distal, mostrando este ultimo mayor riesgo de desnutrición que el primero.
El síndrome de dumping con sudoración, palpitaciones y cierto malestar secundario a la ingesta de carbohidratos de absorción rápida es uno de los efectos secundarios de este tipo de técnica. Se debe a un vaciamiento rápido del remanente gástrico en el yeyuno lo que genera una repuesta hemodinámica y hormonal con gran liberación de insulina e hipoglucemia tardía tras la ingesta.
-Derivación biliopancreática con o sin cruce duodenal
Anula la mayor parte del intestino delgado provocando que las grasas y los hidratos de carbono se absorban solo de forma parcial. La capacidad del estómago no está completamente reducida y la persona puede realizar comidas de cantidad normal.
La pérdida de peso es muy importante, pero el riesgo de deficiencias nutricionales es claramente superior a la del bypass gástrico.
Cuando la derivación biliopancreática se hace con cruce duodenal se combina la gastrectomía tubular o en manga con la derivación biliopancreática, conservándose así la válvula pilórica que permite mantener en parte la función del estómago.
– Otras técnicas más recientes son:
– Mini-bypass: es una derivación asociada a restricción gástrica.
– Bypass duodeno-ileal con gastrectomía en manga (SADI-S) cuya capacidad malabsortiva es variable dependiendo de donde se realice el empalme o anastomosis intestinal.